El nuevo modelo de desarrollo social no solo se basa en generar información, sino que “va más allá y plantea transformaciones sociales, culturales y económicas. Los pilares de las sociedades del conocimiento son el acceso a la información para todos, la libertad de expresión y la diversidad lingüística” (UNESCO).
Para estar a la altura de estos nuevos tiempos y formar parte de la sociedad del conocimiento, ya no basta con estar informados y actualizados, además debemos generar propuestas y generar conocimiento.
Internet es hoy parte de nuestras vidas y ha venido para quedarse. Las grandes fuentes de información están en Internet. La organización, almacenamiento y recuperación de la información ha sido siempre un problema hasta la llegada de las nuevas tecnologías de la información y comunicación. Con el crecimiento exponencial de la información científica hemos dejado de ser acumuladores de información para convertirnos en buscadores de fuentes de información, y cuyo reto es conseguir realizar una buena gestión sobre el exceso de información médica actual. Llegado a este punto es donde quiero enviar el mensaje a mis compañeros y colegas:
“Hoy el principal activo de nuestras sociedades es el capital intelectual de las personas que trabajan y comparten sus conocimientos y sus experiencias”
No se trata de ser expertos en manejo de Medline, o de estar en Twitter todo el día o de escribir en un blog o de poseer el último “chiche” tecnológico, es cuestión de actitud, de cooperación, de trabajo en equipo, de innovar, de generar interrogantes (qué tendrá de nuevo todo esto). En fin es cuestión de sentido del bien común.